Tras una serie de reuniones en Arabia Saudita y en Omán, Hans Grundberg (el enviado de la ONU) celebró “el compromiso de las partes con una serie de medidas para instaurar un alto el fuego en todo el país y para participar en los preparativos para retomar un proceso político inclusivo bajo los auspicios de la ONU”.
El gobierno y los rebeldes de Yemen acordaron respetar un nuevo alto el fuego
